En esta etapa, nos reunimos con el cliente para comprender sus objetivos, necesidades y expectativas. Escuchamos atentamente y hacemos preguntas relevantes para obtener una visión clara del proyecto. Analizamos el mercado, los públicos objetivos y la competencia para identificar oportunidades y desafíos.

Con la información recopilada, desarrollamos una estrategia de comunicación y contenido personalizada. Definimos los mensajes claves, el "tono de voz" y los canales de comunicación más adecuados para alcanzar los objetivos del cliente. También elaboramos un plan detallado que incluye los plazos, los recursos necesarios y los indicadores de éxito.

En esta fase, nuestro equipo trabaja en la creación de contenidos multimedia que permitan que el cliente se destaque y genere el impacto necesario para cumplir con sus objetivos.

Una vez que los contenidos están listos, los implementamos en los canales acordados, ya sea a través de sitios web, redes sociales, campañas de correo electrónico u otros medios. Realizamos un seguimiento constante de las métricas clave para evaluar el desempeño y realizar ajustes si es necesario. También proporcionamos informes periódicos al cliente para mantenerlo informado sobre los resultados obtenidos.